Reflexión de enero: Encuentro BETEL

Nuestro delegado de Pastoral, Kiko Zarza asistió al encuentro BETEL 2024 junto con el resto de delegados de los diferentes colegios del distrito.

Hola a todos, mi nombre es Kiko Zarza, y este año he empezado el camino como Delegado de Pastoral del colegio, un reto sin duda apasionante. Este reto es apasionante que inicio con mucho respeto e incertidumbre, ya que la Pastoral es el sentido de nuestra escuela lasaliana.

La semana del 22 al 26 de enero he tenido la gran suerte de comenzar mi formación distrital con compañeros de toda España que están iniciando el mismo camino en sus obras educativas.

La formación y convivencia ha sido en colegio La Salle Griñón (Madrid), un lugar histórico para la institución lasaliana en España. Este colegio fue durante muchos años noviciado, y los Hermanos se formaban entre las paredes de este bonito edificio. En este colegio podemos encontrar los restos de mártires lasalianos de la Guerra Civil en su hermosa Iglesia.

Durante estos cinco días la formación ha estado animada por el Delegado de Pastoral distrital, Hno. Jorge Sierra, y los Delegados de Pastoral al frente de cada sector del distrito. Este equipo nos ha cuidado como una familia, y todos los participantes nos hemos sentido en CASA con mayúsculas.

Hemos recibido diferentes módulos de formación por profesores y directivos de todo el distrito y también hemos disfrutado de actividades libres donde hemos participado la gran mayoría (Hara, godlyplay, juegos por equipos…). El núcleo de esta formación es el cuidado de la Pastoral en nuestros centros, y darle la importancia que realmente tiene. Ha sido muy rico el vivir la formación con compañeros de todos los rincones de España para compartir experiencias y formas de hacer, todo esto hace que podamos aprender y crecer en comunidad.

La conclusión personal que me llevo de estos primeros días de formación, ya que en febrero la finalizamos, es que las diferentes obras lasaliana de nuestro país son muy diferentes y muy iguales a la vez. Esto quiere decir que trabajamos y realizamos diferentes dinámicas y proyectos pero tenemos el mismo sentimiento lasaliano, y ese sueño que se comenzó hace más de 300 años sigue realizándose actualmente, la evangelización y el cuidado de los niños y jóvenes que más lo necesitan.

La Salle no es un colegio… La Salle es un sentimiento y una forma de ser y vivir.

¡VIVA JESÚS EN NUESTROS CORAZONES!