Aunque el mes de junio quede lejos, nuestras alumnas de ballet se afanan en ampliar sus conocimientos y seguir creciendo en esta disciplina. Nos referimos a junio porque será su puesta de largo, pero todavía quedan más de seis meses de arduo trabajo para controlar el cuerpo que debe ser enseñado desde temprana edad.
Nuestras alumnas que se han iniciado este año en ballet adquieren conocimientos básicos ya que sin lugar a dudas el ballet es una disciplina que requiere concentración y capacidad para el esfuerzo como actitud y forma de vida. Los ejercicios cada vez son más complejos ya que participan invariablemente las manos, brazos, tronco, cabeza, pies, rodillas, todo el cuerpo en una conjunción simultánea de dinámica muscular y mental que debe expresarse en total armonía de movimientos.
Las profesoras dedican el cuerpo y alma en cada una de las sesiones para hacer de nuestras alumnas unas grande conocedoras de ballet, controlen su cuerpo y a su vez sean capaces de expresar todo lo que esta disciplina tiene intrínseca. Seguiremos muy de cerca las evoluciones de nuestras bailarinas y deseamos ver su actuación en el mes de junio.
Somos La Salle